LA VERDAD SOBRE VOLTUS V
Más de uno regresa a la infancia ante el recuerdo de Voltus V. Aquel gigante robótico que se formaba ante la unión de cinco naves de guerra. Desde entonces –y quizás un poco antes-, la mente infantil juega con los fragmentos y el descubrimiento de algo nuevo al juntarlos.
Esa sensación madura en la obra de Frank David Valdés. El hallazgo de fracciones de múltiples motivos, conjugadas en seres amorfos, soluciones inacabadas y grandes manchas, que travesean con la incertidumbre, a veces coquetea con el arte en sí, con el amor, pero también con el sexo.
Así sucede con El sueño que, más allá de su curioso formato, remite a la imaginación. Paradójicamente, el vínculo de las piernas bajo la sábana se decanta más por la insinuación erótica, que por el muestreo de su antecesor. Sin embargo, hay una conjunción específica de fragmentos que conducen al pensamiento, si no es a un único sentido, a uno más definido en comparación con la obra anterior.
La banda sonora para el animado Voltus V entonces asume el fragmento como provocación. La exposición frontal del motivo principal sobre aquel background de múltiples fronteras delimitadas, está llamado a incomodar a la vista, a obligar, al espectador más púdico, a observarla aunque sea un instante. Un fragmento tan claro en su naturaleza que no necesita de complementos o de construcciones, por sí mismo llena, edifica un sentido y sugiere.
Por tanto, como Voltus V, los fragmentos construyen nuevas realidades, a veces amorfas, algunas sugestivas y otras simplemente provocativas. Lo cierto es que la carga de sentido que traen consigo al ser extirpados de su ambiente natural, se potencia en otros escenarios pictóricos, ya sea solos o con otras fracciones.
CONTACTOS
CELL: +53 58065286
EMAIL: frankdavidvaldes@gmail.com
INSTAGRAM: @frank_david_valdes
FACEBOOK: https://www.facebook.com/frankdavid.valdeshernandez





0 comentarios: